Efectos óseos de la obesidad
Dra. Evelin Mingote
Medica especialista en Medicina Interna, Endocrinología y Metabolismo (UBA)
Staff Metabolismo Óseo y Mineral del Servicio de Endocrinología y Metabolismo del Hospital César Milstein
Debido al aumento de su prevalencia, obesidad y osteoporosis se han convertido en importantes problemas de salud mundial en las últimas décadas.
La creencia inicial sobre el papel favorable de la obesidad en el metabolismo óseo se sustentaba principalmente en la correlación positiva entre la densidad mineral ósea y el índice de masa corporal. Posteriormente numerosos estudios mostraron una alta prevalencia de obesidad en mujeres postmenopáusicas con fracturas por fragilidad.
El riesgo de fractura en adultos obesos no es el mismo en todas las localizaciones del esqueleto y parece depender del sitio. También se ha observado un cambio en el patrón de las fracturas según la distribución de la grasa.
La interacción entre la obesidad y el metabolismo óseo es compleja, contradictoria y no se comprende completamente. Se han propuesto diversos mecanismos mecánicos, bioquímicos y hormonales para explicar la asociación entre obesidad y hueso. Si bien el aumento de la carga mecánica y el exceso de tejidos blandos alrededor de los tejidos axiales tiene efectos positivos sobre la salud ósea, existen también numerosos mecanismos con efecto óseo deletéreo. La inflamación crónica sistémica leve y el aumento de la adipogénesis de la médula ósea podrian conducir a una disminución de la masa ósea en personas obesas. Por otra parte podemos enumerar un aumento del riesgo y patrón de las caídas, sedentarismo, sarcopenia, deficiencia de vitamina D, alteración de las adipoquinas y de la microbiota, entre otros.
A pesar del creciente aumento de la incidencia de obesidad y su demostrado impacto en la salud esquelética, las personas con obesidad son subdiagnosticadas y subtratadas, por lo cual resulta imprescindible poder contar con herramientas para poder minimizar el daño óseo en esta población.