Acción ósea del fitoestrógeno genisteína en hipoestrogenismo y obesidad
Dra. Virginia Massheimer
Investigador Principal CONICET- Director Laboratorio Investigaciones Endócrinas básicas y clínicas, UNS-CONICET
Los fitoestrógenos, como las isoflavonas de soja, se proponen como una terapia natural para atenuar el riesgo de patologías cardiovasculares y óseas. La genisteína (Gen), posee similitud estructural con el 17beta estradiol, lo que le permite unirse a los receptores estrógenicos (ERs) y modular las rutas metabólicas activadas por estrógenos. La osteoporosis es una enfermedad prevalente en la menopausia,
atribuida principalmente a la disminución de la producción ovárica de estradiol. Si la mujer menopaúsica a su vez cursa con sobrepeso u obesidad, el estrés oxidativo (EO) e inflamatorio consecuente a la expansión del tejido adiposo blanco (TAB), constituyen un factor de riesgo adicional. El TAB es un órgano metabólico complejo, ya que además de su función primaria como almacenamiento de energía, exhibe función endócrina. Las vesículas extracelulares, transportadoras de adipokinas (Adk) y miRNAs, liberadas por los adipocitos han sido identificadas como la vía de comunicación entre el TAB y los diversos órganos. Las Adk inflamatorias como leptina, resistina, incrementan la osteoclastogénesis promoviendo la fragilidad ósea. Por su parte el EO inhibe la diferenciación de los osteoblastos induciendo su transdiferenciación a fenotipo adipocitario.
Evidencia reciente de nuestro laboratorio demostró que la Gen, en condiciones fisiológicas, promueve la osteoblastogénesis, estimulando la actividad fosfatasa alcalina, la síntesis de osteocalcina, el depósito extracelular de colágeno y la mineralización de la matriz extracelular ósea. El mecanismo de acción de la isoflavona involucra la participación del ER y las vías de señalización intracelular NOS/ERK/PI3K.
La hipótesis actual de nuestras investigaciones plantea si estas acciones óseas de la Gen se sostienen en condiciones de estrés inducidas por hipoestrogenismo y obesidad. Empleando modelos preclínicos de menopausia y obesidad demostramos que la Gen revierte las alteraciones metabólicas óseas inducidas por la obesidad, reduciendo el EO y favoreciendo la proliferación y diferenciación osteoblástica. La Gen exhibe una acción directa sobre el TAB inhibiendo la producción de especies reactivas de oxígeno y productos de peroxidación lipídica. El nexo entre las acciones óseas y adipocitarias de la isoflavona es la reducción de la liberación de leptina por el TAB inducida por la Gen. En conclusión, estos hallazgos podrían ser relevantes en menopausia y obesidad, donde la salud ósea podría mejorarse, en parte, mediante la administración de estrógenos vegetales.